«Los hijos son un regalo del Señor; los frutos del vientre son nuestra recompensa. Los hijos que nos nacen en nuestra juventud son como flechas en manos de un guerrero.» (Salmo 127: 3, 4| RVC) Los momentos junto a nuestra familia, son únicos e irrepetibles. Dejan huellas imborrables. Por eso, debemos procurar que sean agradables.Sigue leyendo "Valore el tiempo con la familia"